Las cosas pequeñas son las más importantes.
No importa tanto la cuestión económica cuando amas a alguien.
Hay que evitar prejuzgar a la gente puesto que todos tenemos circunstancias y experiencias diferentes.
El mundo está plagado de imperfecciones. Y eso está bien.
A veces no hace falta que todas las piezas encajen para que algo sea especial.
Quizás te llegues a sorprender mucho con lo que te depara la vida conforme pasan los años.
Para disfrutar con algo, para compartir un buen rato con alguien, ... no hace falta tanto.
Es en cada detalle por pequeño, insignificante o sin importancia que parezca dónde descubriremos lo que verdaderamente apreciamos y valoramos.